La Campaña "El futuro que queremos" pretendía implicar a personas de todo el mundo en el ejercicio de imaginar cómo las sociedades de todas partes del mundo pueden construir un futuro que promueva la prosperidad y la equidad y que mejore la calidad de vida de las personas dentro de los sistemas que hacen posible la vida en la Tierra.
El resultado de la campaña fue una exposición sobre "Soluciones y visiones" inaugurada el 21 de junio de 2012 en Río+20. Desde diciembre de 2011, personas de todo el mundo enviaron vídeos, pinturas y fotografías con su visión de diversos temas globales, suburbanos, rurales y urbanos.
El objetivo del proyecto era inspirar una "conversación mundial" sobre sostenibilidad y visualizar cada día las soluciones propuestas que nos enseñen qué aspecto tendrá la sostenibilidad, tan abstracta para muchos, en el año 2030.