El taller fue presidido por Maureen Ballestero, presidenta de GWP Costa Rica, y dirigido por Virginia Reyes, quien fue contratada como consultora para hacer la investigación acerca del tema, entrevistar a representantes de organizaciones clave y ayudar a establecer las principales posibles inversiones de proyectos que podrían ser ejecutados en el país a través de PACyD en el futuro.
Entre las instituciones participantes estuvieron el la Secretaría Ejecutiva de Planificación Sectorial Agropecuaria (SEPSA) que forma parte del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), así como otros representantes de este Ministerio. Igualmente participaron funcionarios del Ministerio de Salud, el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), a través de la Dirección de Aguas y de la Dirección de Cambio Climático, la Fundación para el Desarrollo de la Cordillera Volcánica Central (Fundecor), la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) y el Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara), el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), entre otras.
En el taller se hizo la presentación sobre los niveles de implementación de las estrategias y cambio de adaptación al cambio climático y comunicaciones nacionales, abriéndose un espacio para el diálogo. A su vez, se hizo la presentación de las propuestas de acciones y alternativas para lograr la implementación de las estrategias de cambio climático.
El último punto acerca del cual se expuso y conversó consistió en la presentación de ideas de inversión, discusión y priorización para el desarrollo de perfiles de proyectos.
Los participantes compartieron diferentes opciones. Una de las que más llamó la atención se enfocó en la cosecha de agua de lluvia que permita ser de impacto para pequeños productores que en muchas ocasiones llegan a ser los más vulnerables ante el cambio climático.
Tanto la presidenta de GWP Costa Rica, como la consultora en el tema, coincidieron en que los proyectos sugeridos deben ser concretos, pero con impactos muy claros que puedan ser medibles y demostrables, además, que evidencien que se está contribuyendo a mejorar la calidad de vida de personas.
La totalidad de información obtenida en la reunión forma parte de los resultados que servirán para el informe a ser enviado a GWP Centroamérica.