San Salvador, 21 de marzo del 2014.- Se estima que para el 2050 la demanda de energía podría aumentar en un 50% y la demanda de agua podría superar en un 44% los recursos disponibles anuales. En este sentido, es necesario promover las alianzas y la coordinación entre ambos sectores, para promover políticas y acciones integradas que favorezcan un desarrollo energético sostenible y un uso sostenible de los recursos hídricos que contribuyan tanto a la seguridad hídrica como energética. Considerando este nexo evidente, las Naciones Unidas han definido que el tema de la celebración del Día Mundial del Agua el próximo 22 de marzo de 2014 será precisamente, el agua y la energía.
El sector hídrico y el sector energético tienen distintos criterios para la toma de decisiones: los planificadores del sector energético están más enfocados en la diversificación de las fuentes de producción de energía de baja emisión de carbono, mientras que los gestores del agua buscan satisfacer a una diversidad de usuarios de agua, incluyendo el medio ambiente. La cooperación y la coordinación intersectorial en cuanto a políticas y planificación pueden maximizar la oferta de energía y al mismo tiempo minimizar uso excesivo del agua. También pueden reducir el impacto ambiental en general y proteger los medios de subsistencia.
A pesar de la abundancia del recurso agua en Centroamérica, los países de la región utilizan menos del 10% de su oferta hídrica, lo que incide en la disponibilidad del recurso para uso humano y actividades económicas. Así mismo, existe una tendencia en la región a cambiar la matriz energética hacia una menos dependiente de los combustibles fósiles, debido a los altos costos en el mercado internacional. Sumado a esto la región enfrenta otros retos cómo la creciente población que demanda de más agua y energía, y los efectos del cambio climático sobre el recurso hídrico que hace más severas las consecuencias de eventos extremos como inundaciones y sequías. En esta región, como alrededor del mundo, es crucial promover soluciones integradas en los sectores de agua y energía.
Es por ello que GWP Centroamérica ha organizado el "Foro Agua y Energía", evento que se estará llevando a cabo el 21 de marzo, en el Hotel Holiday Inn en San Salvador, El Salvador de 8am a 1pm.
A nivel regional, habrá presentaciones de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), la Alianza en Energía y Ambiente con Centroamérica (AEA), y el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). La agenda también incluye la presentación de casos de los diferentes países de la región sobre el tema. El evento contará con la participación de representantes de organizaciones de gobierno, academia y ONG´S de los 6 países de Centroamérica y varios expertos para abordar temas clave acerca de la relación entre el agua y la energía.
El nexo de agua y energía tiene implicaciones a corto y largo plazo en Centroamérica: En Honduras sólo un 15% del volumen anual disponible en metros cúbicos por segundo (m3/s) del agua es utilizado como recurso energético.La Planta Hidroeléctrica Chixoy de Guatemala provee cerca del 30% de la producción nacional de electricidad. En El Salvador las plantas hidroelécticas, entre ellas la Central Hidroeléctrica Cerrón Grande de El Salvador, producen el 36% de la electricidad que usa en el país. Para el 2020, se estiman disminuciones de hasta 30% en la precipitación para las cuencas del río Chixoy y río Lempa. Así mismo se estiman reducciones en la generación de energía superior al 20% en ambas plantas para el 2020. (CEPAL, 2012)El 51 % de la energía generada en Nicaragua en 2013 provino de fuentes renovables: la geotermia aportó un 16,7 %, la eólica el 14,87 %, la hidroeléctrica el 12,16 % y la biomasa el 7,25 %. (Ministerio de Energía y Minas de Nicaragua)